Las Muertas, la nueva serie dirigida por Luis Estrada, llegó a Netflix el 10 de septiembre de 2025. La producción adapta la célebre novela de Jorge Ibargüengoitia y reinterpreta con audacia el caso real de Las Poquianchis, uno de los episodios criminales más oscuros de México. Estrada, conocido por películas como La Ley de Herodes y El Infierno, vuelve a demostrar su habilidad para tomar historias del México profundo y convertirlas en poderosas sátiras que provocan reflexión.
En esta adaptación, Las Poquianchis se transforman en las hermanas Baladro, interpretadas por Arcelia Ramírez y Paulina Gaitán. Ramírez destacó en entrevistas que trabajó meticulosamente la voz y los movimientos de su personaje para transmitir frialdad y control absoluto, mientras que Gaitán aporta una complejidad emocional que convierte a su personaje en uno de los más comentados de la temporada.
El elenco de apoyo también brilla en cada episodio. Alfonso Herrera da vida a Simón Corona, un panadero y antiguo amante que funge como pieza clave en la caída de las Baladro; Joaquín Cosío interpreta al Capitán Bedoya, un militar corrupto que encarna la complicidad institucional; mientras que Sofía Espinosa es María del Carmen, una joven atrapada en la red de burdeles cuyo intento de escapar destapa la brutalidad del sistema. La serie cuenta además con más de 150 actores, incluyendo a Enrique Arreola, Mauricio Isaac, Leticia Huijara y Arturo Ríos, consolidando un reparto coral que da vida a la compleja trama.
La producción, filmada en locaciones de San Luis Potosí, Guanajuato, Veracruz y los Estudios Churubusco, recrea con precisión la estética de los años 60 y ofrece al espectador una inmersión total en un México marcado por la desigualdad, la violencia de género y la corrupción política. Luis Estrada combina el humor mordaz de Ibargüengoitia con su característico tono satírico para exponer cómo las hermanas Baladro lograron construir un imperio criminal bajo la protección de caciques, militares y autoridades locales.
Con tan solo seis episodios, Las Muertas se perfila como una de las series mexicanas más poderosas y comentadas del año en Netflix. Entre la ficción y la realidad, la producción ofrece una mirada feroz al lado oscuro del poder y a las víctimas invisibles de un sistema corrupto. Más allá de ser un relato criminal, se erige como un espejo de un México que, a pesar de los años, sigue debatiéndose entre la memoria y la repetición de sus tragedias.
