El ambicioso proyecto Marvel Zombies, derivado de What If…?, fue diseñado originalmente como una película animada de gran escala. El showrunner Bryan Andrews explicó (vía) que la idea inicial era un “épico” de dos horas y media que ampliara el universo animado de Marvel. Sin embargo, ese plan se derrumbó cuando salieron a la luz limitaciones contractuales vinculadas a la presencia de Spider-Man.
El problema se centra en los derechos cinematográficos del héroe arácnido, que pertenecen a Sony. La compañía impone reglas estrictas sobre cómo y en qué formatos puede aparecer Spider-Man en pantalla grande. Mientras Sony tiene libertad para producir películas animadas como la exitosa saga Spider-Verse, Marvel y Disney no cuentan con esa autorización. Al descubrir esta restricción, Andrews y su equipo se vieron obligados a abandonar la idea del largometraje.
“Fue un momento de sorpresa”, admitió el director al recordar el instante en que supieron que no podían seguir adelante con la película: “¡Oh, mierda, ¿eso es algo? Oh no, supongo que no podemos hacer eso!”. Ante esta limitación, la única salida fue transformar Marvel Zombies en una miniserie de cuatro episodios, disponible en Disney+.
Aunque Andrews lamentó no haber tenido más tiempo y recursos para extender cada capítulo, aclaró que el formato actual funciona como “cuatro capítulos de un libro”. Spider-Man sí aparece en la serie, con la voz de Hudson Thames, pero incluso su rol secundario impidió que el proyecto pudiera presentarse en formato de película.
El futuro de Marvel Zombies dependerá ahora de la respuesta de los fans. Si la serie logra suficiente éxito, el equipo creativo espera obtener más presupuesto y quizá más libertades contractuales para continuar expandiendo la historia, aunque la barrera de los derechos de Spider-Man seguirá siendo un factor determinante.
