En la primera media hora de El Doble, cuando la narración en off comienza a ser muy reflexiva, ya se puede sentir que la película adoptará una receta de noir. En este caso, el personaje-narrador de Ryan Gosling quizás esté demasiado preocupado con sus pensamientos intrusivos (y no por casualidad un personaje en cierto momento lo acusa de hablar demasiado sobre sí mismo) para darse cuenta de que en realidad está caminando hacia una trampa típica del género.
Tanto la búsqueda de la verdad como el trauma del pasado que pide ser redimido son las dos situaciones básicas del noir a las que El Doble recurre, en esta historia sobre un profesional de Hollywood que gana la segunda oportunidad de probar su valor como doble y su amor por una directora debutante (Emily Blunt). Mientras seguimos el rodaje de este debut, el doble se encuentra con un misterio policial que involucra a la estrella que él reemplaza en escena (interpretado por Aaron Taylor-Johnson).
Adherirse a estas reglas es una conveniencia que el guion de Drew Pearce abraza con mucha facilidad, porque hoy el noir - un género que a lo largo de los años de neonoir se ha acostumbrado cada vez más a hablar sobre los entresijos de Hollywood - se inclina naturalmente hacia lo irónico, lo literal y lo autoconsciente. ¿Era esta elección inevitable? Quizás sí, porque Ryan Gosling ya ha interpretado roles en el cine que eran versiones irónicas (Dos Tipos Peligrosos) y no irónicas (Drive) del mismo doble-detective que ahora revisita.
¿Interpretar repetidamente al mismo personaje exige que comiences a hacerlo de manera irónica? Es una pregunta pertinente, pero en sus reflexiones El Doble no tiene interés en profundizar sobre ella - no solo porque toda la producción pop del cine americano se adapta al consumo irónico, sino principalmente porque el director David Leitch quiere que lo literal y lo autoconsciente trabajen a su favor. Exdoble que se convirtió en director en la primera John Wick (2014), Leitch hace esta película inspirada en la serie de televisión de los ochenta The Fall Guy para, a través de la metalingüística, reclamar una marca para sí mismo. Está completando una década como director, es legítimo que se permita esa vanidad.
Es con el propósito de exaltar a la clase injustamente tratada de los dobles, por lo tanto, de la cual Leitch y su compañía 87North se presentan como portavoces, que seguimos esta mezcla de comedia romántica de acción y pastiche de noir que involucra a Ryan Gosling y Emily Blunt. El plano secuencia que abre la película está hecho para indicar que la pareja tiene química, y la escena de la combustión da el sabor de la guerra de sexos que la dinámica tensionada exige - y parece ser suficiente. A partir de ahí, El Doble se dedica a sacar soluciones elaboradas para señalar la metanarrativa y, al igual que su protagonista, comienza a hablar mucho sobre sí mismo.
Para una película que podría ser ligera como las comedias románticas o sencilla como las películas de acción, El Doble se centra demasiado en la autorreferencia. Es evidente que los dobles merecen reconocimiento y una categoría propia en los Oscar, pero lo literal y lo utilitario hacen todo más pesado en la película de Leitch - director que se desempeña mejor en la simplicidad vigorosa de Atómica (2017) que en la complejidad textual de Tren Bala (2022). Por su parte, los guiones de Drew Pearce se expresan mejor cuando encuentran a un cineasta cuya energía está precisamente en la vocación por el pastiche, como Shane Black (que dirigió Iron Man 3 basado en el guion de Pearce y luego trabajó con Gosling en Dos Tipos Peligrosos).
Que la solución "genial" que el personaje de Emily Blunt encuentra para su dilema en el tercer acto sea solo una escena de pelea en cámara lenta - igual a cualquier blockbuster de acción que no sabe qué hacer con su tercer acto - dice mucho sobre las limitaciones del texto de Pearce y de El Doble como un todo. Por lo demás, aunque sigan haciéndose excelentes comedias noir en Hollywood (como Un Caso de Detective o Confiesa, Fletch), nos asola esta realidad en la que incluso una película de besos y disparos necesita tener utilidad para que reconozcan su valor.
Año: 2024
País / Nación: EUA
Classificação: 14 Años
Duración: 125 min
Dirección: David Leitch
Argumento: Drew Pearce
Elenco: Aaron Taylor-Johnson, Emily Blunt, Ryan Gosling