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El nuevo episodio del podcast Inside of You, de Michael Rosenbaum —recordado por interpretar a Lex Luthor en Smallville— invitó a Allison Mack, exestrella de la serie y pieza clave en el escándalo criminal de NXIVM, para hablar sobre su vida tras salir de prisión.
Lejos de tomarse como una entrevista reflexiva o crítica, miles de usuarios interpretaron el gesto como un intento de “lavado de imagen”, generando una ola de repudio en redes sociales. El enojo fue inmediato: para muchos, dar voz a Mack, condenada por su rol en la secta liderada por Keith Raniere, es incompatible con la gravedad de sus actos y el dolor de las víctimas.
En Reddit y X, los usuarios fueron implacables. Un hilo en Reddit se volvió el eje de la indignación al señalar que el “regreso” público de Mack estaba siendo impulsado por Rosenbaum. Comentarios virales acusaron al actor de buscar relevancia y reproducciones a costa de un caso criminal profundamente doloroso. En X, varias respuestas al clip promocional cuestionaron directamente: “¿Por qué no entrevistar a una víctima en lugar de darle este espacio?”.
Recordando la gravedad del caso NXIVM
Usuarios no permitieron que la conversación se “suavizara”. Recordaron que Mack no solo fue reclutadora: también participó en coaccionar mujeres, ejecutar marcajes rituales y actuar como una figura de poder dentro del círculo interno de Raniere. Aunque la justicia reconoció que también fue víctima de manipulación psicológica, esto no la eximió de culpa. Su condena —tres años, de los cuales cumplió 21 meses— sigue siendo vista por muchos como demasiado indulgente para su nivel de participación.
El centro del debate gira en torno a una idea: ¿Es correcto otorgar a Mack un espacio mediático tan pronto después de su liberación? Algunos usuarios sugieren que la actriz debería llevar una vida discreta, enfocada en la reparación y no en una reaparición pública. Otros cuestionan por qué el enfoque sigue estando en ella y no en las víctimas. Como resumen irónico, un usuario escribió: “La única forma de que desaparezcan es no darles vistas ni likes”.
La entrevista reavivó detalles del caso: Mack se declaró culpable de crimen organizado, admitió coacción psicológica y financiera sobre mujeres vulnerables, y ayudó a sostener la estructura del culto. Aunque colaboró con las autoridades, lo que redujo su sentencia, el daño causado sigue siendo motivo de debate y dolor para quienes siguieron el caso.