El actor Noah Centineo intentó unirse al boicot contra Disney+ en apoyo a Jimmy Kimmel, pero su gesto terminó convirtiéndose en un chiste viral. El protagonista de películas juveniles compartió en Instagram la captura de pantalla de la cancelación de su suscripción, acompañada de la frase “Ahorros de dinero hoy”.
Sin embargo, un detalle no pasó desapercibido para los usuarios: la notificación mostraba que su acceso al servicio seguiría activo hasta septiembre de 2026. En lugar de un acto de protesta contundente, el movimiento reveló que Centineo ya había pagado por adelantado un plan anual o multianual, garantizando ingresos a la misma empresa a la que pretendía sancionar.
La publicación, que fue eliminada poco después, desató varias críticas, memes y comentarios sarcásticos en redes sociales. Muchos señalaron la ironía de engrosar las arcas de Disney justo en el momento en que buscaba manifestar descontento. En Twitter y TikTok lo acusaron de “activismo de intérprete” y de no haber pensado en alternativas más efectivas, como cancelar un plan mensual que sí habría supuesto un corte inmediato del servicio.
Más allá de las intenciones de Centineo, la percepción pública fue clara: su gesto se vio precipitado, mal calculado y carente de fuerza simbólica. Algunos usuarios incluso defendieron al actor sugiriendo que pudo tratarse de una renovación automática, pero ese matiz no impidió que la narrativa dominante fuera la de un fracaso estrepitoso. En cuestión de horas, pasó de presentarse como un aliado de la protesta a ser retratado como un ejemplo de cómo no realizar activismo digital.