La teoría arrancó como un chiste casual en TikTok, pero el algoritmo la adoptó con tal entusiasmo que pronto escaló a debates, comparaciones milimétricas y análisis casi detectivescos: Timothée Chalamet es la persona que está detrás de la identidad del rapero EsDeeKid.
EsDeeKid es un artista surgido de Liverpool cuya estética agresiva, letras oscuras y anonimato casi absoluto lo han convertido en uno de los nombres más discutidos del alt-rap británico. El simple hecho de que siempre use pasamontañas abrió la puerta perfecta para la imaginación colectiva: si no se sabe quién es, entonces podría ser cualquiera, incluso una estrella de Hollywood. Su álbum Rebel alcanzó notoriedad suficiente para que la teoría tomara fuerza entre fans que disfrutan conectar puntos improbables.
Los seguidores que defienden la idea han levantado una colección curiosa de “pruebas”: ojos que “se parecen demasiado”, un pañuelo de Alexander McQueen usado por ambos, un gesto de brazo que coincide con uno que Chalamet hizo años atrás, y la asistencia del actor a un concierto underground donde colaboran amigos cercanos de EsDeeKid. La interpretación es libre, y el internet nunca desaprovecha una conexión conveniente. Para algunos, estas coincidencias son pura casualidad; para otros, pistas de una doble vida fascinante.
the timothee chalamet is esdeekid theory has got to be top 5 conspiracy theories of all time pic.twitter.com/DD2DNKZWRz
— sof ꩜ (@blurromance) November 14, 2025
La barrera más comentada entre la teoría y la realidad es el acento Scouse de EsDeeKid, radicalmente distinto al de Chalamet. Aun así, los entusiastas del rumor argumentan que un actor profesional puede adoptar cualquier acento si quiere mantener un proyecto oculto sin influencias de su fama. Y en un giro perfecto para alimentar la fantasía, Chalamet respondió con un simple emoji de ojos a un video analizando la teoría, desatando miles de comentarios y asegurando que la historia siga creciendo.
En medio de toda la especulación, no hay evidencia sólida que confirme la teoría, pero eso parece irrelevante para su éxito. La fascinación radica en la posibilidad, por absurda que sea, de que una celebridad que vive bajo los reflectores decida ocultarse en una escena musical cruda y clandestina.